Un restaurante japonés en occidente debería ser como disfrutar en cualquier fogón de la avenida Chuo-Ko o la Mitaka-Shi de Tokio. Debe ser o, al menos, parecerlo.
La cocina japonesa es el reflejo de una ancestral forma de entender la vida. Las distintas expresiones de esa cultura nipona esbozan un perfecto equilibrio entre los elementos esenciales a la vida. De allí que en sus ambientes permanecen las formas simples y geométricas referidas a la sencillez de sus espíritus y a la búsqueda de la armonía entre el cuerpo y la mente. El cuadrado como forma geométrica remite a la perfección de las formas del hombre. El circulo a la existencia de un yo-céntrico que pueda ser figura de su entorno o la periferia de la experiencia humana.
La restauranteria japonesa busca exactamente ese reflejo del ser japonés. Sus formas, sus colores, su geometría. Incluso las cantidades y las porciones. El rompimiento del cuadrado al tener tres hijos es también una búsqueda para asentar la permanencia del atrevimiento humano. Dos padres mas tres hijos son cinco porciones.
En la cocina japonesa la forma cilíndrica instaura diálogos con su concepción circular de la vida. La vajilla redonda en nuestra cultura deviene en la geometría cuadrática y rectangular. El troceado de sus elementos asegura una mixtura de ingredientes y sabores.
En razón de estos preceptos nos acercamos al restaurante Umi Sushi & Teppan. Un espacio en donde se encuentra presente la armonía característica de lo japonés; la unión esplendorosa de distintas tonalidades con la perfección y belleza que evocan los jardines orientales y el respeto por los espacios abiertos. La permanente intersección del afuera y el adentro en el que lo “intimo” siempre es el “afuera” que nos espera.
Umi Sushi & Teppan es capaz de convertir la experiencia de comer en una recreación que puedan percibir y degustar todos los sentidos. Es acercarnos al mapa de la gastronomía nipona, al afecto por la perfección, la debilidad por lo preciso. Lo sencillo es lo bello, lo limpio es lo exacto.
La disposición de sus espacios con un claro acento vanguardista, crea el inicio de un dialogo que nos involucra. La utilización de los materiales y los colores. La calidez de la madera y la utilización de los tonos suaves colorean el entusiasmo por comenzar esta experiencia exuberante y siempre excitante. La iluminación y el mobiliario abren la frescura que nos acompaña desde la tenue cortina de agua nos abraza al entrar. Las planchas tipo “teppan” no solamente rigen la disposición del mobiliario. La escogencia acertada de las mesas y las sillas dan confort y descanso a los comensales. La vajilla hecha en la Isla de Margarita y una cubertería sin ostentación nos preparan al disfrute. Estar en Umi Sushi & Teppan es visitar una porción de perfección en su ambiente y su atmósfera. Sencillez y sobriedad. El bálsamo de su espacio ya es alimento para los sentidos. Sin duda, estar en este sobrio restaurante es iniciar un dialogo hacia nosotros.
A publicarse en Revista Paladares Arte Gastronomico. Edicion Octubre. No. 4. Isla de Margarita