Llegar al Restaurant Dolphin es llegar a una fiesta en casa de amigos, donde anfitriones e invitados disfrutan del festín y la alegría de poder gozar de la buena mesa. Una familia unida y trabajadora que en sala nos recibe con respeto y cordialidad mientras en cocina colecta y recolecta su tradición siciliana traída a estas tierras.
Este restaurante lo disfrutamos no solo por sus espacios cómodos y amables. La diferenciación de cuatro áreas que deja a cada comensal la oportunidad de escoger el que mejor se ajuste a sus deseos o requerimientos. Logrando mantener su hospitalidad y esa atmósfera (ese misterioso “no sé qué”) que tanto enamora y atrae a residentes y visitantes. Porque adicionalmente a esto debemos agregar la afabilidad de cada uno de los profesionales de las mesas que nos atienden y complacen. Estables y permanentes lo que hace segura la visita y confiable sus sugerencias. Cuánto se añora en la Isla de Margarita un restaurante honesto con un equipo de mesoneros y anfitriones que sea estable e inquebrantable.