miércoles, junio 12, 2013

¿GASTRONOMIA TURISTICA O TURISMO GASTRONOMICO? MARGARITA GASTRONOMICA Y LA CATEGORIZACION DE RESTAURANTES

La Isla de Margarita ha venido convirtiéndose en una referencia de turismo gastronómico nacional en los últimos tiempos, sin saberlo. ¿A quién no le han encargado un queso de bola cuando viene a pasar unos días en la isla? ¡A cuántos no nos encargan alguna bebida o licor de antigüedad cuando vamos a alguna reunión o paseo por el territorio nacional? ¿Cuántos matrimonios en el país no han sido regados y bautizados con los spirits de la oferta local? Las facilidades arancelarias desde tiempos de la Colonia han determinado no solo las posibilidades comerciales sino también con sus productos, ingredientes, condimentos y especias reformulan, cambian o evolucionan las recetas y sabores. A todo ello agregamos la inacabable oferta de licores que a través de los atractivos precios siempre han terminado por elaborar una provocadora carta de caldos, destilados y espumantes que son buscados por aficionados o catadores, por propios y extraños. Es así como desde hace 10 años ha venido cambiando consecuentemente la oferta gastronómica en la ínsula, afianzándose este atractivo adicional e importante como destino turístico por excelencia. A saber ya no solo aquella oferta de playas y comercio que seduce a millones de visitantes, sino también la seguridad, las mesas y la generosa hospitalidad del margariteño.


La carta internacional, los sabores del mestizaje, la popular oferta asiática, los exóticos gustos del medio oriente, unidos a los valiosos emprendimientos que se incluyen en la agenda turística de la Isla, han refrescado el panorama de los últimos tiempos. Aquí ha venido sosteniéndose los consabidos restaurantes a orilla de playa, incipientes ejercicios de la oferta culinaria familiar como el Trimar en Pampatar, quien inventó una manera de conjugar la primera posada con restaurante en la bahía, o las delicias de Dorina en El Tirano, o Cachicato en Porlamar o recordemos a Rómulo y Juana Castillo en su puesto del mercado municipal. Recordamos los ejercicios de mayor solidez en infraestructura, decoración y servicios como las ofertas del Hotel Concorde o la Av. 4 de Mayo y la Av. Santiago Mariño (¿quién no recuerda los restaurantes La Casa de Rubén en la Ray-O-Vac, Da Gaspar, Martin Pescador o Cheers, incluso Dugout en los 90?), con ellos se encaminó la palestra gastronómica hacia una cartelera culinaria sostenible y confiable desde el punto de vista comercial.

En Pampatar, luego del surgimiento de centros comerciales como La Redoma, Rattan Plaza y Sambil Margarita, cambió ya para siempre el panorama comercial y gastronómico margariteño. Con el surgimiento de las primeras ferias de comida en estos centros comerciales aunados a los restaurantes con cartas especializadas y de profesionales cocineros se asentó, ahora sí, una consistente oferta de comida contemporánea y variada, en espacios seguros, asépticos y pensados para el disfrute y la alimentación de propios y extraños. Tobak, Entre amigos en Rattan Plaza y el impertérrito A Granel.

Ha habido altibajos en estos últimos 20 años. Han desaparecido verdaderos iconos de la gastronomía local como Dugout, Utopía Café o La Langosta así como han deslumbrado tantos otros que fugazmente derriten paladares y pupilas de comensales y visitantes como Restaurante Tobak en C.C. La Redoma. Han ocurrido fracasos inimaginables, derrotas que nos han dolido como si fueran las caídas de la Vinotinto. No obstante también han aparecido rescates y negocios que han llegado ya para siempre en nuestro paladar, como El Remo, Dolphin o Casa Caranta. Del mismo modo, en el que la ultima movida gastronómica que invade el mundo y nuestro país, ha vuelto su vista hacia la isla. Es la fiebre del Km 0 y el respeto a la biodiversidad local de cada territorio. Este efecto, ha hecho que volvamos la vista hacia nuestros productos locales, ingredientes propios y con denominación de origen que dan una identidad propia e indiscutible a nuestros sabores y el gusto profundamente margariteño de nuestros platos.

Ese refuerzo de lo nuestro y lo local, que nos hace forjar caminos de pertenencia e identidad a través del ají dulce y el tomate margariteños; los sabores casi perdidos del pepino de monte, el jobo, el pan de año, la pomalaca. El rescate por la identificación especifica de la infinita variedad de nuestra pesca local. Y si vamos mas allá, entonces hurgamos en los recetarios y conseguimos combinaciones, creaciones y platos emblemáticos de nuestra cocina, muchos de los cuales reposan en la memoria gustativa del margariteño y del que tan solo la cocinera Esther González ha rescatado más de 100 recetas, no bien recordamos las que incluye el Maestro Ángel Félix Gómez en su libro "Historia y Antología de la Gastronomía Margariteña", o los que el Chef Rubén Santiago repasa y reinventa cada día en su restaurante que recoge en su volumen: “Vuelta a la Isla en 80 platos”.

Efectivamente, hoy son muchas las razones para ser optimistas. Cuatro escuelas que residen en Nueva Esparta capacitan y sensibilizan a jóvenes y profesionales en el arte de la restaurantería, el servicio, la cocteleria, la hotelería y el arte gastronómico. De allí que anualmente sean cerca de una centena de profesionales salgan a la calle con herramientas y conocimientos suficientes para seguir creando y recreando nuestros sabores.

Muchos los empresarios y productores que se han avocado a la siembra y cultivo de productos locales. Otros los artesanos gastronómicos que han dado impulso a la construcción de nuevos productos y sabores tanto como los que nos ayudan a rescatar la dulcería local o la facilidad de las nuevas tecnologías y mercadeos para traer frescos y seguros alimentos procesados y de fuentes naturales e inmediatas a nuestra mesa: los productos marinos que en cantidades suficientes y necesarias nos aporta nuestro mar Caribe; territorio, frontera y paisaje signo de nuestra insularidad.

¿Quién duda hoy de la calidad de nuestros productos, el agrado de nuestras recetas y la satisfacción de nuestros platos y el placer innegable de nuestros sabores?
Hay que decirlo con firmeza y claridad, Margarita ha iniciado un largo camino para proponer sabores inolvidables en el espectro turístico nacional e internacional. Un caleidoscopio de recetas, productos, despensa, nacionalidades, mestizajes y recetas que nos hablan de una gastronomía pujante, vibrante, exquisita…

MARGARITA EN EL MAPA TURISTICO NACIONAL POR SU GASTRONOMIA

Las responsabilidades que ha logrado asumir el empresariado nacional y regional van más allá de su entorno corporativo y comercial. Abarca una vanguardista visión del mundo y su entorno, su ambiente y las responsabilidades sociales con su comunidad mediata. Fortaleciéndose en la unión de esfuerzos para la construcción de una nueva forma de ofrecer la isla de Margarita como destino turístico dentro y fuera del país se impulsa una visión avanzada del empresario que se relaciona e intercambia acciones con el colectivo sirviendo de puentes para ofrecer no sólo confort y crecimiento económico sino que además se imbrica en los lazos culturales y sociales para alcanzar justicia social y una más justa distribución de las riquezas locales.

Ahora, ¿qué busca Margarita Gastronómica con el impulso y soporte que da a toda la actividad culinaria en el Estado Nueva Esparta?
-Busca consolidar la gastronomía ya no solo como factor de aglutinamiento de características sociológicas y antropológicas, de identidades y nacionalidad, sino también en la consecución de un tejido económico robusto y sostenible.
-La extensión de una estructura económica que avance en el fortalecimiento del crecimiento humano en armonía con el entorno inmediato.
-La construcción de una oferta gastronómica que estructure y solidifique a la Isla de Margarita como destino turístico nacional e internacional sustentable, sostenible, abierto, solidario y justo.
-Y finalmente, aunque parezca ambicioso, indagar en la posibilidad de alcanzar una mayor justicia social tomando como punto de arranque los valores de identidad, desarrollo y evolución que le son inherentes al ser humano.

En la búsqueda de estos principios básicos se consolida también este programa de Categorización de Restaurantes en el Estado Nueva Esparta. Porque en la medida que podamos construir seguridad y responsabilidad en la oferta gastronómica, en esa misma medida iremos consolidando un extenso tejido económico que vibra detrás de un plato que llega a su mesa. Aquí están involucrados cientos de personas: profesionales, obreros, emprendedores, propietarios, empresarios, cultivadores, agricultores, pescadores, mercados, académicos, madres, hijos y turistas… en fin, una lista imbricada de fortaleza y necesidad, que se consolida en la medida que su movimiento crece y se dinamiza, trayendo crecimiento y evolución natural.

Sabemos del caso de países latinoamericanos como México, Colombia, Ecuador y Perú cómo han venido cambiando sus parámetros apoyando el apalancamiento de sus estructura económica, cultural y social en la actividad gastronómica y se han conseguido milagros como en Perú donde ya la actividad gastronómica se convierte en una de las más importantes en impulso, aporte al Producto Interno Bruto y crecimiento, tanto como construye felicidades al dar oportunidades, evolución y progreso abierto, incluyente y solidario. En la medida que la oferta culinaria sea responsable, segura, amplia, sana y estable, estaremos construyendo uno de los valores sólidos sobre los que se levanta un destino turístico: que sea sostenible, sustentable y seguro.

Es en esa estratificación objetiva y normativa que propone este Programa de Categorización de Restaurantes que Margarita Gastronómica cierra filas, sentando las bases para organizar el espectro comercial de la gastronomía. Asegurando servicios y atención adecuada. Infraestructura de calidad, mobiliario de calidad y confort. Y en estos tiempos, que garantice los medios de pago, reservación e interacción propios de estos tiempos globalizados y entrelazados de redes, tecnologías y servicios.

El resultado de esta iniciativa viene a sentar entonces las bases para que empresarios, cocineros, emprendedores, oficiantes, académicos, promotores y gremios se unan para proponer una oferta gastronómica estable y responsable; manteniendo un discurso amable y coherente ante propios y visitantes. Claro y unido, en el que todos se involucren para rescatar el empeño de quienes soñamos con un país seguro, feliz y organizado que seduzca al turista e involucre a todos quienes residimos en la Isla de Margarita para relanzarla como destino turístico por excelencia.
Esta es otra bandera posible para posicionar la Isla de Margarita en el mapa y el calendario gastronómico de nuestro país y el mundo. El año pasado lo hicimos durante los 30 días de Junio. Podemos hacerlo durante todo el año.  ¡Juntos podemos hacerlo!

MARGARITA GASTRONOMICA… ¡COMETELA A PEDACITOS!
Fernando Escorcia
Margarita Gastronomica
Martes, 11 de JUnio, 2013

1 comentario:

  1. Muy buen informe! Si quieren conocer sobre la cultura árabe, los invito a visitar la página de Annurtv, donde encontrarán mucha información valiosa! Se los recomiendo! Arte, cultura, religión, sabores de medio oriente y mucho más!

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