Hace aproximadamente 15 años escribí en mi columna Con
Agua o Con Soda (que luego se convirtió en un programa de radio) que Gaia
Peri, creadora de Mediterráneo Café, hablaba como un emigrante quien recién se esta bajando del avión que la
trajo desde la costa amalfitana junto con sus sabores y sus recetas. Ella y su
hermano Davide comenzaron hace 18 años el Café Mediterráneo en Porlamar. Y desde allí
nunca dejó de crecer, aun con pausas.
Mediterráneo Café por algunas extrañas
circunstancias desapareció durante años de la oferta gastronómica margariteña.
Supimos extrañarla y recordarla con mucha profusión. E igualmente supimos
apreciar su valor en los tiempos en los que la oferta culinaria insular se vino
al piso, y fueron los restaurantes residentes en los centros comerciales quienes
crearon moda y estilos. No obstante, pronto llegaron nuevamente los
restaurantes de calle, urbanos o de piso, para enriquecer nuestra pizarra de
oportunidades y ampliar el menú de platos y mesas en Pampatar y Porlamar. Aun
cuando Gaia Trattoria que reside hoy frente a aquella taguarita en la calle
Campos es muy diferente a la de sus inicios, esta conserva la delicada
arquitectura de la mesa, los bellos detalles marinos en mesa y sala, junto al
sabroso ambiente mediterráneo que nos hace acercarnos a la inveterada tradición
de las fondas o trattorias italianas con su menú en cartelera leído al momento
con los platos del día.