jueves, mayo 08, 2014

2da. FERIA DE LA FOSFORERA EN PAMPATAR


LA FOSFORERA: IDENTIDAD Y EXPRESION POPULAR. 
Con una excelente asistencia de público se llevó a lugar la 2da. Feria de la Fosforera de Pampatar 2014. Fue una maravillosa experiencia para confirmar que las comunidades entusiastas y activadas en torno a su identidad culinaria, pueden hacer actividades de promoción y difusión junto a los gobiernos locales, representados en este caso por la Comisión de Turismo de la Alcaldía de Maneiro. De esta manera, se ha logrado mostrar no solo las distintas versiones que de este caldo oriental pueden darse en esta localidad tanto como otras versiones venidas de Macanao, La Asunción, Los Robles y hasta de tierra firme. Hermoso ver las posibilidades de evolución de esta receta venezolana conjugando la sabiduría popular con los avances de la cocina practica y profesional.
Este encuentro de cocineros de oficio, cultores de la cocina margariteña y los diletantes de los fogones le dio variedad a esta feria, que es en definitiva parte de lo que uno desea para nuestro país: la unión de la familia venezolana celebrando en torno a un plato en su mesa con las distintas opciones para escoger en libertad y en armonía.
Se presentaron 25 versiones de este nutritivo y polémico plato marino, 18 entraron en concurso y en la degustación y evaluación de ellos se tuvo especial cuidado de cuidar los ingredientes, productos y pasos que la receta tradicional indica abriendo el compás para que se expresaran las creaciones y las innovaciones sensatas. Incluso explorando en las cultoras de los fogones insulares secretos, ingredientes y misterios de su sazón, momentos curiosos y pintorescos que nos llevamos de este feriado gastronómico. Por ejemplo, se aprecio una fosforera que contenía más de 17 especies de mariscos y moluscos, dándole una fortaleza en su contenido fosfórico y alimenticio. Otros osaron echar mano de sus recursos de oficio y aderezaron con pimienta, aceite de oliva y jerez, elementos que a todas luces variaron el resultado final del plato. Dato curioso nos lo dio la Sra. Lérida de la comunidad de La Caranta en Pampatar, cuando nos explicó que la utilización de la auyama como agente espesante del caldo más que ello, procura dar la consistencia en sabor y potaje que sea digerible por los mas chicos de la casa, tan esquivos a la hora de comer sopas o hervidos con tantos “animalitos” en su plato. Cosas maravillosas puede contar uno de cada feria o festival. Cosas sorprendentes que resaltan y destacan la hermosa contundencia de la sabiduría popular.